Este año he tenido una experiencia muy dura, pero a la vez positiva. Después de muchísimos años sin estudiar decidí matricularme en el bachiller on-line, esta decisión la tomé al darme cuenta de que me hacia falta para poder ascender en mi trabajo, y desde ese momento empezó mi ardua tarea. Compaginar la vida familiar y laboral con los estudios no es una empresa fácil, en muchas ocasiones, principalmente al final de cada trimestre, no sabe uno que atender, y eso que yo sólo me matricule de cinco asignaturas de primero.
Pero estando ya en el final del curso, puedo ver ya la luz al final del túnel, y esto me hace animarme un poco más.
Os animo a todos los que dudéis en tomar una decisión como la mía, que no os lo penséis y os echéis para delante, ya que merece la pena.
Hay que destacar que el apoyo que me ha prestado el profesorado ha sido clave para poder realizar este curso, desde este blog quiero agradecerlo públicamente, en mi quedan todos los conocimientos y recursos nuevos que he adquirido y que en su mayoría ignoraba.
Espero que algún día la enseñanza a través de estas nuevas tecnologías este al alcance de todo el mundo.